La cultura organizacional hace referencia a la prioridad que asigna la Organización a distintas relaciones, conflictos, retos y su manera de resolver situaciones cotidianas. Algunas de las prioridades son asignadas en forma explícita desde la “misión” formal de la institución. Otras son implícitas: las creencias y premisas que todos los empleados comparten y acatan, formando lo que se conoce como “aquí hacemos las cosas así ”.

No hay organización humana que no esté inmersa en una cultura y no hay cultura que no haya sido construida y delimitada por una organización humana; ésta relación cultura/organización humana va a definir lo que tiene o no sentido para las personas que hacen parte de una entidad/empresa, sea ésta de naturaleza pública o privada.

Toda intervención es legible a través de los intereses, la concepción de cultura y la idea de organización, que requiere una lectura cultural donde se espera encontrar posibilidades de recuperar las diversas capas de las tensiones producidas en las relaciones sociales y sus significados dentro de la institución.

• La caracterización permite conocer la realidad organizacional, así como, los significados compartidos por las personas que la conforman, esto facilita la identificación de la ruta de intervención y permite que las personas descubran la realidad que han construido y tomen la decisión de transformar aquello que hasta ese momento les está afectando.

El proceso de intervención de la cultura organizacional, logra que la misión, la visión y las personas estén sincronizados con los resultados de la organización.